Maternidad.

Ayer, en un programa de televisión, se planteó un debate, de si las adolescentes estaban preparadas para ser madres.

Creo, que desde un primer momento, la pregunta estaba mal planteada, porque a que se referían con la palabra preparadas, porque desde luego, no preparadas, también puede haber mujeres de 30 años.

Yo desde luego, mi primera pregunta sería, a que nos referimos cuando estamos diciendo no preparadas, porque puede haber niñas de 14 años preparadas para ser madres y mujeres de 30 años no preparadas para ser madres.

La palabra preparada, entiendo que tiene que abarcar, desde lo psíquico a lo físico, e incluso a lo material.

Porque una niña de 14 años, no puede estar preparada para ser madre, primero, evidentemente por su edad, porque es la edad de estar en el colegio estudiando, preparándose un futuro, disfrutando de su juventud con las amigas, etc..., pero también hay otra cosa importante, y es la independencia, está claro, que una niña de 14 años sola, y sin ayuda de nadie, no puede sacar a su bebe adelante, con lo cual ya simplemente por ese motivo, y por muy amueblada que tenga esa niña su cabeza, no está preparada para ser madre, porque no le puede ofrecer las garantías de seguridad y estabilidad que un bebe necesita, y es entonces cuando entran en juego el papel de los abuelos, que pasan a ser protagonistas de esta historia, la de hacer la función de abuelos y padres de esa criatura, por eso digo, que la palabra preparadas, no solo podemos referirla a la edad, esa palabra abarca mucho más.

Podríamos incluso extenderla a madres o parejas, ya de más edad, porque desde el momento que una pareja, no tiene una estabilidad económica en su vida, desde mi punto de vista, tampoco están preparados para ser padres, porque no pueden ofrecer esas garantías de una vida mínimamente digna, para que un bebe pueda vivir, ojo, que tampoco hay que confundir, cuando en una pareja trabajan los dos, y quien principalmente se hacen cargo de ese bebe, son los abuelos, o algún familiar, son cosas distintas.

Por eso digo, que ese programa de televisión, al menos es lo que percibí yo, solo se tocaba el tema del no estar preparadas, desde el punto de vista de la edad, pero que hay más factores, por el cual una niña, e incluso una adulta, no está preparada para ser madre.
En el caso del factor de la edad, y si se cuenta con el apoyo incondicional de los padres, desde luego, que la situación es bien distinta, y si aún encima esa niña, tiene un alto valor psicológico, pues mejor aún.

Pero en el caso de que una niña no tenga ese apoyo familiar, ni tan siquiera el social, que camino es el que debería de tomar esa niña, con respecto a la continuidad de su embarazo, es difícil la elección, sobre todo en los tiempos que corren, con el tema del aborto, yo desde luego, no voy a opinar ni pronunciarme sobre esto, no es el tema que propuse hoy, pero lo que si quiero dejar claro es, que la libertad de actuación, está por encima de cualquier cosa, y que nunca se deberá de criminalizar a ninguna persona, y en este caso a las mujeres, por la decisión que tomen, es su vida, es que acaso, ¿sabemos algo nosotros de su vida?, como para meternos en ella, dejemos que cada uno o una, haga lo que su conciencia le diga, eso sí, sin faltarle nunca a nadie, el asesoramiento, más que los consejos, que cualquier ser humano se merece.

Y empecemos por los colegios y centros de enseñanza, a dedicarle el tiempo necesario, a que nuestra juventud, reciba una buena educación sexual, desde bien temprana edad, y vuelvo a repetir, dedicándole el tiempo necesario, y no, que quede reducido a la más minima expresión.

¡Ah!, y quiero recalcar, que en ciertas profesiones, nunca se puede aplicar para una forma de actuar, las creencias religiosas, o la propia conciencia personal y particular de cada uno, tratándose de terceras personas, y mucho menos, cuando esas profesiones, son pagadas con nuestros impuestos, o si se refiere a un negocio que tiene un fin público en cuanto a salud, y que aún encima, las licencias de apertura de eses negocios las concede el estado.

Al que no le guste esa profesión, que se busque otra, y al que no quiere atender debidamente en su negocio a las personas que demandan de sus servicios, que se busquen otro tipo de negocio, que el mercado es grande, pero la atención a los ciudadanos en cuanto todo lo referente a la salud pública se refiere, es de todos, y no de una exclusividad.