Aunque hace tiempo que no escribo nada
sobre él, pero en esta ocasión, a raíz de una noticia que vi sobre lo ocurrido
con Nairo Quintana, me ha hecho reflexionar de nuevo sobre lo mal tratados que
estamos los ciclistas por parte de las Instituciones que rigen el devenir del
ciclismo. (Aunque nadie me quita de la cabeza, que todo es por culpa del
pelotón ciclista y lo poco que se está unido para luchar en conjunto contra las
injusticias que en numerosas ocasiones se vienen produciendo, y que en otras
reflexiones que hice ya he comentado).
El caso que viene a cuento en mi reflexión
de hoy, es como dije antes, lo ocurrido con Nairo Quintana, y su
descalificación del Tour de Francia por positivo con Tramadol.
El Tramadol, es un analgésico opioide, que
alivia el dolor y no mejora el rendimiento de un deportista. Está prohibido su
uso por la UCI desde el año 2019, y “solamente
está prohibido en el deporte del ciclismo”, según dicen, para salvaguardar
la salud de los ciclistas.
Nosotros debemos de ser más papistas que el
papa, o sea, el deporte ciclista es uno de los más arriesgados y propensos a
padecer dolor, por culpa de las caídas y otros menesteres, y somos el único
deporte que está prohibido el uso del Tramadol…yo de verdad que, a veces,
alucino con todo esto.
Y para más inri, el uso de este fármaco, no
es un doping propiamente dicho, sino que es una infracción al reglamento médico.
No constituye una infracción a las normas antidopaje y no conlleva sanción
alguna, salvo claro, que Nairo, por lo de pronto, fue descalificado del Tour.
Todos sabemos lo que significa Doping, pero
bueno, lo recuerdo, “es la
administración o utilización de sustancias extrañas al organismo o de
sustancias fisiológicas, en cantidades o por vías anormales, con el único fin
de conseguir un aumento artificial del rendimiento de un deportista para
participar en una competición”.
O sea, que Nairo Quintana no ha dado
positivo por doping, sino que ha dado positivo por violar el reglamento médico,
(presunto), y no corresponde sanción, por ser la primera vez, pero ya ha sido sancionado.
Visto lo visto, que mal lo deben de estar haciendo
el resto de deportes!. Por cierto, cuando Rafa Nadal, fue infiltrado para
aliviar sus dolores en el pie en pleno partido de tenis, (cosa permitida en el
tenis), hubo bastantes ciclistas que se quejaron del porque se le permitía y a
ellos no. Tan fácil como quejarse donde hay que hacerlo. No puede ser, (en mi
humilde opinión), que haya formas de trato distintos, según para que deporte, y
no será porque el ciclismo no es duro, complicado y violento accidentalmente
hablando. Y si no hacen caso, aquí no sale ni dios, por los cojones, hacen eso
en otros deportes…..
Y no quiero con esto, sacarle importancia
al dopaje, o quererlo justificar, para nada, pero si habéis estado siguiendo
todo esto del doping en el ciclismo, habréis visto la cantidad de injusticias
que se cometen. Algunas causan verdadera repugnancia, como el caso del ciclista
belga Kevin Van Impe, que lo fueron a buscar al tanatorio en el que estaba
preparando el funeral de su hijo, que había fallecido un poco antes, al nacer
prematuro, para hacerle un control de orina. Y bastantes más casos que ha
habido y seguirá habiendo.
Podréis estar o no de acuerdo conmigo, pero
yo lo único que pido, es un mismo trato para todos los deportes y sus
deportistas…incluido el ciclismo..., no
puede ser que algunos determinados medicamentos o sus formas de administración,
estén autorizados en prácticamente todos los deportes, menos en el ciclismo.
Ahora bien, todos sabemos en qué manos está
la solución. Dejemos de una vez por todas de ser el patito feo del deporte!!! (aclaro,
en todos los sentidos).
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